Apostémoslo todo a una mano. No tengas miedo; por una vez confía en tu suerte. Vamos a jugárnoslo todo. Pero todo, ¿eh?. Nada de medias tintas. No pongas esa cara. Si ganas tú, hago lo que tú me digas. Y si gano yo... me tienes que hacer una promesa. Me tienes que prometer que nunca me dejarás, ¿vale? Bien, pues entonces reparte las cartas y que empiece el juego.
Inma *
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Fill my blog with your smiles :)