jueves, 30 de diciembre de 2010

Revenge is sweeter

Notaba sus manos cálidas, sus dedos que apretaban mi cuerpo. Yo continuaba fumando, aparentemente indiferente, pero a la vez sentía un gran placer. Y no precisamente por aquel momento. Podía verle, lo veía a través de aquel que me tocaba, podía ver su cara, lo veía sufrir, casi sentía caer sus lágrimas y cómo se ahogaba en cada suspiro. Esa visión me permitía continuar fingiendo con mi compañero, y hacerle creer que cada jadeo lo producía él.
Y no, no era cruel, ¡no lo era! ¿Por qué tenía yo que ser la mala? Ese sufrimiento no era nada comparado con el que él me había hecho sentir a mí, y sí, disfrutaba con ello.
Acabé el cigarrillo e incrementé el ritmo según pensaba en esto. Ya no me dolía el pecho cuando pensaba en él, ni tampoco me enfurecía; no lo odiaba, tampoco le quería, sólo podía serle indiferente. Gracias a él ya no sentía nada, mi corazón era estéril y se encontraba vacío. Si por ahí se me calificaba de "femme fatale" me daba igual. Lo único que ahora hacía era buscar mi propia felicidad, o al menos un falso bienestar con el que poder joderle todavía más. Lo que más siento es que no puedas verme, pensé, esbozando una amarga e imperceptible sonrisa.

                                                                                                           Inma *

lunes, 27 de diciembre de 2010

My friend, my enemy

              Please, show me what I wanna see

Don't try to find me

All I want it's to get lost in a dense and dark forest...
                       
                                                                                                             Inma *

sábado, 25 de diciembre de 2010

                                                                                 
                                            
FUCK  
            
all those              
  
FAKES

viernes, 17 de diciembre de 2010

I know, but...

Me faltaba la respiración. No podía correr más. Mierda, el ascensor iba demasiado lento. De no haber sido por la maleta, habría subido por la escalera, comiéndome los escalones de tres en tres para llegar lo antes posible. Por fin llegué al tercer piso. La puerta estaba frente a mí, y yo no encontraba las llaves en el interior de mi bolso. De repente, paré en seco. Y lo supe. Dentro ya no había nadie. Pero me quedé parada, normalizando mi respiración. Al rato, ya sin prisa, volví a rebuscar hasta que dí con el llavero del osito. Introducí la llave en la cerradura y la giré. Tras ella sólo había silencio. Caminé lentamente por el pasillo hasta llegar al dormitorio. Mi corazón se encogió al ver la cama desnuda, sin sábanas, las estanterías vacías de fotos o adornos, y el escritorio, siempre lleno a rebosar de libros, papeles, lápices y carboncillos, ahora estaba limpio. Sabía lo que me encontraría, aún así, abrí el armario. Vacío. Cinco o seis perchas en un rincón. Y algo en el fondo. Un sobre. Qué considerado, ironicé para mí. No ponía nada en él que indicase hacia quién iba dirigido, pero sólo podía ser yo. Saqué la carta de su interior.

Sabía que abrirías el armario. Siempre quieres asegurarte.
Sabes que te estuve esperando. Sabes que te quise más que a nadie. Y sabes que yo no tuve la culpa. Sé que no es grato que te lo diga, y me duele herirte, aún me duele, pero sabes que tengo razón. Me he cansado de aguantar tus juegos, de que se rían de mí a mis espaldas y de ser siempre yo quien se arrastre por tí. Se acabó. Sabes que todavía te quiero, y que no será fácil olvidarte, pero quiero hacerlo, de verdad. Todo esto lo sabes, pero parece que se te olvida. Sabes que yo te soy sincero, sin embargo, en cuanto otro te miente diciéndote lo mismo, también le crees, por encima de mí. Sé que me quieres, pero eso no es suficiente. Mientras yo te he dado el cien por cien, tú sólo recibías, y no me entregabas nada a cambio. Sabes que tengo razón. Y también sabías que este día llegaría, que no estaría en esta habitación, igual que yo sabía que volverías. Nos conocemos bien. Tan bien, que sabes que algún día volveré contigo de nuevo, y yo sé que después me volveré a ir. Sabes que todas las cosas están en el trastero, porque pronto habrá que volver a colocarlas en su sitio, No te hagas la sorprendida, en el fondo lo sabías. Sabes tan bien como yo quién sale siempre perdiendo, y quién volverá a perder esta vez. Quiero olvidarte, y esto es verdad, quiero no quererte. De hecho, quiero odiarte. Pero no puedo. Y aunque intente convencerme de ello, cada vez que regreses te volveré a amar. Y así para siempre. Lo sabes. 
Lo único que no sé es cuánto aguantaré esta vez" 
 
Lloré. Lloré porque era cierto. Todo. La culpa era mía, yo era la mala. Le hacía mucho daño queriéndolo, pero no a él sólo. No quise prometerme que esa sería la última vez porque ya lo había hecho muchas veces y al final siempre acababa rompiendo mi promesa. Yo también quería olvidarlo y dejar de hacerle sufrir. Pero tampoco podía. Hice la cama y coloqué todo en su sitio. Para cuando quisiera volver.
Entonces dejé las llaves sobre la cama y me marché. Ya era hora de hacerle feliz.


                                                                                                                              Inma *

lunes, 6 de diciembre de 2010

Impotence


Estos días estoy rara. Salir del ambiente habitual te hace ver las cosas desde una perspectiva diferente. Y ahora siento que esto no es para mí, que yo no pertenezco a este ámbito, que hay algo esperándome fuera de aquí, preparado especialmente para mí, hecho a mi medida. No sé si de verdad siento que ese lugar existe o es la necesidad de escapar la que me hace creer que de verdad eso está por ahí. Pero, aunque me muero por salir a buscarlo, ando un poco perdida, no sé muy bien por dónde empezar. Y esta atmósfera me oprime. Siento cómo me consumo, cómo mis ilusiones van quedando en nada. Ya no sé ni cómo soy, porque me he convertido en lo que todos, en un clon, que no se queja, que no lucha por conseguir lo que de verdad desea, que si no tiene lo que se supone que debería tener, no vale nada. Estoy incómoda, triste, y constantemente sufriendo altibajos emocionales. Un día estoy genial; la chica más feliz del mundo. Al día siguiente soy la peor persona que existe. Me juzgo a cada instante, por si no tuviera suficiente con que lo hagan los demás. Y soy incapaz de demostrar mis emociones, porque me siento débil. Y yo quiero ser fuerte. Enfrentar los problemas de cara, no agachar la cabeza ante nadie, seguir mis propias normas e ir contracorriente. Sufrir y superarlo. Decir abiertamente lo que quiero, y conseguirlo. Hacer que la gente me valore por cómo soy. Ser feliz, pero currármelo. Tener la valentía de intentarlo.
                                                                                                               Inma *

Lust

La tensión era demasiado fuerte. Yo estaba que me subía por las paredes, y más tarde me dí cuenta de que no era la única. Me esfrozaba para que no se me notase, pero a la mínima se me iba la vista hacia él. Sin embargo, pensaba que él ni se había fijado en mí. Fue en el momento en que nos quedamos solos cuando la gota colmó el vaso, saltó la chispa, bueno, más bien, directamente explotó. No sé si fue él quien realizó el primer movimiento o fui yo, ya que mutua e inmediatamente nos seguimos el uno al otro. Pero, ¿cómo se llamaba? Al segundo beso me acordé. "Ah, sí". Memoricé cada lunar de su cuerpo, me aprendí el volumen de cada músculo, seguí el recorrido de las venas de su brazo y el de la línea de su espalda una y mil veces, acompasé el ritmo de su respiración, medí la fuerza de sus movimientos o grabé en mi piel su contacto casi antes de recordar su nombre. Nos complementábamos bien, extraordinariamente bien, mi cuerpo se adaptaba al suyo; encajábamos como en un puzzle, y ambos teníamos la sensación de que el otro era esa persona. Todo iba tan rápido que ni sabía dónde estábamos, nos metimos en el primer cuarto que encontramos en nuestro camino de ropa por el suelo. Pero daba igual. Daba igual el tiempo; que en cualquier momento alguien pudiese volver. Daba igual que prácticamente ni nos conociésemos, porque en breve él sería quien más me conocía. Yo ya no tenía conciencia de fechas ni de medidas, salvo la de la distancia entre él y yo, que, sin embargo, era aún demasiado grande. Por mucho que nos acercásemos, nunca sería suficiente. 
Ese día comprendí que el cielo existe, pero no hace falta morirse para alcanzarlo.


                                                                                                          Inma *

Surrender

¿Por qué lo das todo por sentado? ¿Por qué tienes tan claro que me quedaré aquí sentada, esperándote y viendo cómo el tiempo pasa por mi lado sin esperarme él a mí? ¿Y si ahora cojo todo y me voy? O, mejor, me voy dejando todo aquí. Dejándote mis recuerdos y los tuyos, para que pueda olvidarte, pero tú a mí no. ¿Me echarías de menos si lo hago? Sería una buena lección contra tu prepotencia, que abarca tu vida y la mía, y por una vez serías tú el que sufre. Lo que más rabia me da es saber que tienes razón, que no me iré, que estaré aquí, esperándote, ajena a todo, hasta que seas tú el que decida volver.

                                                           Inma *

Smile to me, please

Una sonrisa. Es todo lo que te pido. Que me regales una sonrisa. Si me lo permites, haré una exigencia; te exijo que la sonrisa sea sincera. Quiero poder ver a través de ella. Y llegar a entender por qué sonríes y por qué no, cuándo fue la última vez que lo hiciste de verdad. No me valen las sonrisas falsas, ni las corteses, que haces por educación. Y mucho menos esas sonrisas vacías, esas que no transmiten nada, porque no hay nada en ellas, porque no contienen nada. Quiero que me sonrías, que sea especialmente a mí, que me la dediques, que esa sonrisa me pertenezca, que le pongas nombre y apellidos. Que pueda guardarla como un recuerdo, como tu último recuerdo. Que sea eterna y dure para siempre.

                                                                                                                     Inma *

Boulevard of Broken Dreams

Ponme la última copa. La última, de verdad. Con esta despejaré mi mente, y el alcohol se llevará todo lo malo. Ya no voy a llorar más si no es de felicidad. No me preocuparé por nada que no tenga solución. Me olvidaré de mis sueños frustrados, de los objetivos que me puse y el destino me impidió conseguir. Voy a aprender a vivir la realidad, y no las esperanzas. Voy a superar las cosas, no a dejarlas guardadas en el cajón del resentimiento. Pero antes, una más. Deja que me regodee aún un poco en mi miseria, para no olvidar nunca por qué llegué hasta aquí.
La última, esta vez en serio.
                                                                                                                    Inma *
                                                                                                                      

Locked

Me miras, pero no me ves. Me oyes, pero no me escuchas. Me tocas, pero no me sientes. Quiero saber qué se esconde tras esa impasible coraza, y ver cómo eres en realidad. Me he cansado de tu careta, esa que queda tan bien ante los demás, pero que pega tan poco con tu cara. ¿De verdad no hay nada tras esos ojos inexpresivos y ese corazón de hielo? ¿Tan vacío estás?
                                                      Inma *

sábado, 4 de diciembre de 2010

Changes

Una calle, de noche, casi desierta, únicamente con las luces de unas farolas. 


Una pareja, de la que sólo se distinguen sus sombras. Una figura masculina, alta, de hombros anchos y pelo corto. La chica, pequeña, delgada, mirando hacia arriba, el pelo largo sobre sus hombros.

Se oye una discusión. Gritos, reprimendas que duelen, exigencias de explicaciones, palabras que hacen mucho daño, amenazas, el atisbo de unas lágrimas que se traga el orgullo, y el distanciamiento inminente.

Silencio.

Y la calle es la misma, las farolas siguen ahí, aún es de noche y todo son simples sombras oscuras y sin color.
Y ella sigue siendo ella, exactamente igual.
Y él también.
Y, sin embargo, ya nada es lo mismo.

                                                                                                             Inma *

lunes, 22 de noviembre de 2010

Make me keep staying

Mientras se nos recuerda, seguimos vivos.
Recuérdame, aunque sea en un rincón y a escondidas. No me dejes ir.
            La sombra del viento

domingo, 21 de noviembre de 2010

Nightmares

Algunas noches me olvido de que estoy sola y siento su olor, y hasta la calidez de su cuerpo bajo el edredón, pero es el deseo lo que me provoca estas fiebres, estas temperaturas tan altas que me hacen delirar. Escucho su respiración acompasada junto a mí, pero el silencio interrumpe esa ilusión. Para cuando me doy cuenta de que sólo estoy soñando despierta, la almohada ya está llena de lágrimas, y mi corazón se ha encogido un poco más.
                                                                                                                           Inma *

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Breathless

No, no quiero que me hables. No me toques, ni me mires. No te acerques. Aléjate, piensa que ya no me conoces.
A partir de ahora seremos como extraños, por duro que sea. Incineraré tus recuerdos, buenos y malos, lanzaré las cenizas al mar, y nunca más volveré a visitar esa playa.
Sal de esta habitación, no quiero aspirar tu aroma, no quiero sentir tu presencia. Vete, por favor, no pienses más en mí. Hazlo, y hazlo tú, porque yo no soy capaz.
                                                          Inma *





Next time you point a finger,
I hope it's at the mirror




                             Paramore

martes, 16 de noviembre de 2010

flood

Siento que me ahogo, y eso que el agua aún no ha sobrepasado mi nariz. Me sumerjo un poco más ignorando las reducidas dimensiones de la bañera y arrastro conmigo todo lo que, en realidad, me está empujando hacia el fondo. Cierro los ojos, que también quedan cubiertos, y permanezco así, sin moverme, sin pensar en nada, esperando a que deje de llegar oxígeno a mi cerebro y todo pierda sentido. No quiero dejar a mi mente divagar. No quiero que mi último pensamiento sea para quien me ha llevado hasta aquí. Simplemente quiero irme ya. Pero me duelen los pulmones, la cabeza me da vueltas, e, involuntariamente, mi cuerpo parece que flota, emerge como atraído por un imán, y una bocanada de aire entra por mi pecho.
                                                                                                                   Inma * 

                                                                                                                  

The beginning of the end

Ni un ruido. Ni un sonido. Ni una respiración. Sólo había silencio. Silencio y destrucción. Nada más. Ni siquiera se veían restos de cadáveres. Todo se había reducido a nada, pues ya nada tenía valor. El precio del ser humano estaba pagado. Las consecuencias de la irracionalidad eran visibles, aunque nadie nunca las pudiese ver. Se destrozaron las ciudades, los seres vivos se deintegraron, y se llevaron al odio con ellos; al causante del fin. La desaparición de la humanidad se hizo realidad. En concreto, por muy extraño que suene, la desaparición de la existencia. La decadencia había sido palpable durante años, pero el miedo la dejó avanzar y arrasar con todo. Ya no había luz, ni tampoco calor. Todo era oscuro y frío, siendo "todo" igual a "nada". La tierra se volvió estéril, y la raza humana desapareció para siempre. El detonante fue el odio. El odio entre países, culturas, religiones y personas. Pero, ¿acaso no procedía este odio de la más simple ignorancia?

Nos encontramos aquí, en el principio del fin.
                                                                                                                    Inma*

Poppy's dream

Frente a mí se alza una alta vitrina que me sobrepasa y alcanza el techo. En lo alto de ésta, dentro de una urna de cristal, hay una amapola, roja, brillante y perfecta que destaca entre tanta oscuridad. No hay puertas ni ventanas, pero aún así puedo ver lo que hay delante, y sin embargo no soy capaz de apreciar mis brazos. Alargo las manos hacia arriba, pero está demasiado alta. Cada segundo que pasa, la flor me resulta más inalcanzable y lejana, mi frustración aumenta, pero también mi ansiedad y las ganas de cogerla. Aunque no hay ni un sólo resquicio de luz en la sala, desde algún sitio entra aire fresco, que se va intensificando hasta el punto de convertirse en un irrefrenable viento que me empuja hacia atrás, cada vez más y más lejos. Según me voy distanciando, su intensa luz se vuelve débil, llegando a ser imposible de distinguir. La oscuridad me envuelve, y es entonces cuando despierto.
                                                                                                           Inma *

lunes, 15 de noviembre de 2010

Diffused


Estoy en un bosque oscuro, rodeada por cientos de altos árboles que se ciernen sobre mí dispuestos a impedirme la huida. El sol se encuentra prácticamente escondido tras algún montículo, y sus débiles rayos apenas se filtran entre las hojas de las ramas entrelazadas. Sólo se aprecia un tibio resplandor que da un tono verde oscuro al suelo y al mullido techo. No sé a dónde ir. Izquierda o derecha, adelante o atrás, da igual; no hay diferencia entre esos conceptos. Todos llevan al mismo sitio, y todos conducen a ninguna parte. No hay salida. Comienza a hacer viento. No alcanzo a ver el cielo, y no sé si se aproximan nubes de tormenta, aunque la ausencia de seres vivos distintos de las plantas me lleva a pensar que es muy probable. Tengo frío. Ya estoy cansada de correr tratando de escapar, y las piernas ya no me responden. Todo se mantiene en un sombrío e inquietante silencio, que se rompe tras el rugido de un trueno que suena más cercano de lo que esperaba. Junto con la primera gota de lluvia que cae y se desliza por mi frente, yo también me desvanezco, sin llegar a sentir la tierra bajo mi piel.
                                                                                                                      Inma *

domingo, 31 de octubre de 2010

Realize

Hay momentos en la vida en los que todo parece borroso. Las decisiones han sido tomadas, sólo puedo continuar. Me conozco como la palma de mi mano; puedo preveer cualquier reacción. Mi vida es algo confusa. He hecho todo para llegar a este punto, y ahora estoy aquí, jodidamente aburrido. Lo más duro es saber que aún sigo vivo.
                                                                           Mr. Nobody

Feelings

Como goma quemada,
como un bidón de gasolina,
como el petróleo que cubre el mar,
como un fuego apagado,
como un montón de simples cenizas,
como el polvo que cubre una estantería durante años,
como la arena que se mete en los ojos...

               (....)

Como el olor del mar,
como un riachuelo de agua fresca, 
como una brisa suave,
como el chocolate fundido,
como la risa de un bebé,
como el olor a vainilla,
como una sonrisa...

    (maybe tomorrow)

                                             Inma *

miércoles, 27 de octubre de 2010

Déjame volar contigo...

martes, 26 de octubre de 2010

Goodbye..

Sus besos se quedaron tras aquella puerta, su sonrisa en el retrovisor, y su último abrazo, sólo en su recuerdo. Pero ese recuerdo era como un espejo, o como el cristal de una ventana por el que mirar cuando se sintiese sola a tantos kilómetros de distancia, y por el que poder verlo de nuevo. Se secó esa lágrima solitaria que le resbalaba por la mejilla y se aferró al volante intentando encontrar en el camino que se abría ante ella lo que había ido a buscar.

                                                                                                        Inma *                      

lunes, 25 de octubre de 2010

Shut up, Bitch! You are just like them

       




Hey, that's your way, 
right to hypocrisyland

sábado, 23 de octubre de 2010

Come on, time! 
                                                                        Pass quickly!

viernes, 22 de octubre de 2010

Como huesos, tan fuertes, y sin embargo acaban convertidos en polvo... 
...like love 
                                                                                                        Inma *

...and that voice...

                   


   Who's there?
Who's talking inside my head?

domingo, 17 de octubre de 2010

Para ser imprescindible uno debe buscar siempre ser diferente.
                                                              Coco Chanel

sábado, 16 de octubre de 2010

                              Keep calm and Carry on

EQUILIBRIO


                          Keeping the Balance

the big fear

Siempre hay un momento en la vida de cada persona en el que te paras en seco y empiezas a pensar. Te replanteas cada decisión, cada gesto, cada palabra, cada pensamiento y cada actitud. ¿Es esto real? Quiero decir, ¿de verdad este eres TÚ? ¿No eres otro plagio producto de esta sociedad tan controladora a la que no se le escapa nada ni nadie? Mírate bien. Ahora mira la gente que te rodea. ¿No te ves reflejado en ellos? ¿No ves en ellos tu ropa, tu peinado, tu estilo, o incluso tu forma de caminar? ¿Sí? ¿No? ¿NS/NC? Búscate a tí mismo entre tantas personas iguales, como en el juego de "Encuentra a Wally", sólo que aún más difícil. Descúbrete como realmente eres y no como debes ser.

                                                                                                             Inma *

                                             FUCK EVERYONE!!!
                                 

sábado, 2 de octubre de 2010

flyflyflyfly

Podía escuchar los coches pasar bajo mi ventana y las voces de la gente en la calle. Sin embargo, yo estaba a kilómetros de distancia, a muchos más metros de altura, en un apartamento de paredes oscuras desde el que se veía toda la ciudad, viviendo mi propia vida, la que yo me había creado, pero que era muy diferente a la de verdad. En el fondo sabía que era un error pensar en esa realidad paralela, porque me alejaba cada vez más de la mía, pero me confortaba, y me sentía falsamente feliz. 
Cada vez ansiaba más alejarme de aquí. 
       
                                                                    Inma *

Running away

Después de mucho tiempo, por fin conseguí entrar en esa habitación estando la luz encendida. Pensé que debía hacer muchos cambios allí. Cambié las sábanas, y tiré las que habían cubierto antes el colchón. Aún conservaban su olor. Puse música. Sum 41. A todo volumen. No quería pensar. Me giré. Cogí una foto que había sobre una estantería, entre otras muchas. Pero era esa la que me importaba. Mejor dicho, la que no me importaba. Ya no me importaba. Al menos eso era lo que quería hacerme creer a mí misma. La cogí casi sin mirarla. También fue directa al cubo de la basura, marco incluido. Me senté en la cama y miré a mi alrededor. La estruendosa música continuaba sonando. Frente a mí ví, colgado en el perchero, ese pañuelo gris que adoraba. No quería deshacerme de él, pero cada vez que lo viera me recordaría inevitablemente a ÉL. No quise darle más vueltas. Siguió el mismo camino que las sábanas y el retrato. Entonces me acordé de los otros regalos desperdigados por mi cuarto; pendientes en joyeros, zapatos en armarios... Y todos los recuerdos; entradas de cine, de conciertos, esa flor seca enterrada en mi libro favorito... Me dí cuenta de que tenía un gran nudo en la garganta y una necesidad enorme de llorar. Ahora no podía ocuparme de todo eso. Salí apagando de nuevo la luz, arrastrando la papelera y mis sentimientos, y aplazando el dolor para más tarde, alargándolo también de esa forma. 
                                                                                                              Inma *

lunes, 27 de septiembre de 2010

...Just Dreams...

Estoy cansada. Quiero cambiar. Cambiarlo todo. Me he cansado de ver siempre las mismas cosas, día a día las mismas caras, con pequeñas variaciones. Recorrer siempre el mismo camino. Que el despertador suene siempre a la misma hora. No ver nada fuera de lo normal, nada que me llame la atención, nada distinto. Me gustaría evadirme. Evaporarme. Eso es, convertirme en vapor, y así poder volar. Parar el tiempo. Sí, es lo que quiero. Que todo se detenga. Poder disfrutar del silencio y la soledad totales. Salir a la calle, en medio de la lluvia... eso sería lo mejor. Bañarme entre miles de diminutas gotitas de agua. Descansar de la monotonía. Parar el tiempo, eso es lo que quiero. Me tumbaría en medio de un prado, donde se encontrara la hierba más verde y brillante. Y soñaría que todo es así; que todo es tan colorido y tiene tanto brillo como ese césped. Que el humo de los coches y fábricas es en realidad simple vapor de agua. Que el tono de voz más alto es el de la risa a carcajadas. Que no existe el sufrimiento ni el dolor. Que el amor no correspondido tan sólo es un mito. Que la falsedad sólo existe en las películas. Que todo es posible, si se lucha por ello. Que el lenguaje universal es la música. Que las pistolas se utilizan sólo para dar salida en las carreras. Que todo es tan sencillo como simplemente soñarlo. Parar el tiempo... Sí, eso es lo que quiero. 
 
 
                                                                      Inma *

domingo, 26 de septiembre de 2010

Everything is in yourself

¿Por qué necesitamos algo/alguien en lo que creer? ¿No tenemos suficiente con nosotros mismos? ¿Por qué nos prometemos constantemente cambiar? ¿Por qué deseamos día tras día ser otra persona? ¿Por qué no nos basta con lo que tenemos, con lo que sabemos, con lo que somos? ¿Por qué nos empecinamos en cambiar? Tal vez si basáramos estos esfuerzos en otras cosas y nos conformásemos con cómo somos todo nos parecería más real. Porque a mí cada vez todo me parece más falso e irreal. No hay sinceridad, no hay fluidez, no hay originalidad. No hay suficiente valentía como para mirarte en el espejo y decir: ésta soy yo. No soy rubia ni tengo los ojos azules, sino que mi pelo es castaño y mis ojos marrones, corrientes. No tengo unas medidas perfectas ni soy alta. Soy una persona impaciente, demasiado sensible, y le busco (y encuentro) defectos a todo. Pero así soy yo. Y mientras que yo me guste, todo lo demás no importa. La clave está en quererse primero a uno mismo. 



                                                                                                                           Inma *

jueves, 23 de septiembre de 2010

This is my religion


                                                                                                30 Seconds To Mars
                                                                                                   Just AWESOME!!
                                            

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Abandoned

El frío de la noche era ya parte de mí. No serían más de las nueve y media, pero había muy poca gente en la calle. Iba a ser algo más difícil, pero no imposible. Un hombre se dirigía hacia mí. Cuando nos cruzamos choqué con él. A propósito, claro.
-Perdone, lo siento -me disculpé.
-Tranquilo, no importa -me dijo. Aferró su maletín y siguió su camino. Cuando le hube dado la espalda, sin detenerme, abrí la cartera que antes estaba en el bolsillo izquierdo de su pantalón. Patrick Fitz. Entre la decena de tarjetas de crédito encontré 500$ en efectivo. Con eso me sobraba. Me sentía fatal por haberlo vuelto a hacer, pero lo necesitaba para sobrevivir en la terrible selva que Manhattan era para mí. De repente me topé de bruces con el escaparate de una tienda; con mi propio reflejo, que no parecía mío. Esa no era mi cara. Esos ojos tristes y hundidos no eran míos. Ni ese era mi pelo, que ahora estaba tan largo y grasiento. ¿Y esa barba? ¿Desde cuándo estaba ahí? Preferí no mirarme más y devié la mirada. De pronto me asaltó un pensamiento. Iba a hacer la buena obra del día. Bueno, lo del día era un decir.  Más bien del mes, o del año. Me giré y eché a correr. El tipo no andaba muy lejos. Crucé los dedos para que no tomara ningún taxi ni cogiera ningún coche de los que había por allí aparcados. La suerte me sonrió por una vez. Anduvo unos cuantos metros más y entró en uno de los apartamentos de esa misma acera. Una vez hubo entrado en su casa, eché su cartera al buzón, guardándome para mí 400$. Pensé que no le supondría una gran tragedia, debido a todas las tarjetas de crédito, seguro llenas. Se lo agradecí con el pensamiento, aún sabiendo que si se los hubiera pedido no me habría dado ni un dólar. Me alejé de allí rápidamente y me dirigí a casa, si es que se podía llamar así. Ni siquiera era mía, y mucho menos era un hogar. Nadie me esperaba allí. Había estabo deshabitada unos 10 o 20 años. No tenía agua corriente ni luz, ya que nadie pagaba las facturas. Tenía que usar velas para alumbrarme entre la penumbra y botellas de agua para asearme. pero al menos tenía un sitio en el que esconderme y lamentarme, y que la lluvia no traspasaba, excepto por algunas goteras del techo. Además nadie sabía que vivía allí, y mucho menos que existía un lugar por el que entrar sin ser visto. Me arrinconé en una esquina e intenté conciliar el sueño tratando de ignorar el inmenso silencio y la negra soledad que se cernían sobre mí.
                                                  Inma *

martes, 21 de septiembre de 2010

Lovegame

Apostémoslo todo a una mano. No tengas miedo; por una vez confía en tu suerte. Vamos a jugárnoslo todo. Pero todo, ¿eh?. Nada de medias tintas. No pongas esa cara. Si ganas tú, hago lo que tú me digas. Y si gano yo... me tienes que hacer una promesa. Me tienes que prometer que nunca me dejarás, ¿vale? Bien, pues entonces reparte las cartas y que empiece el juego.
                                                                                                           Inma *

lunes, 20 de septiembre de 2010

And here I am, watching the clock
that's ticking away my time...    




                                     The Pretty Reckless

sábado, 18 de septiembre de 2010

Dear Love...


¿Dónde te has metido todo este tiempo? Te busqué por todas partes, pero no aparecías. Pensaba que te habías olvidado de mí. Pero ya veo que no.
Tengo que pedirte disculpas, porque llegué a pensar que no existías, aunque ahora retiro esos pensamientos porque sé que no eran ciertos.

Ha pasado mucho tiempo sin verte. En estos años he cambiado mucho, tanto física como mentalmente. La madurez ha llamado a mi puerta. Ahora ya sé lo que quiero, y poco a poco voy encauzando mi vida. Pero no pienses que ya está todo hecho, aún me queda mucho camino por recorrer. Y ahora, contigo bien cerca, creo que todo será mucho más fácil. Sin embargo, creo que he estado muy equivocada, demasiado, tal vez. Verás, puede que me equivoque, pero, tú nunca te has ido, ¿verdad? Todo este tiempo has estado aquí, junto a mí, pero yo no he sabido verte. Casi ni te sentía. Ahora me he dado cuenta. Y por eso te noto con más fuerza.Ya sé que no sólo se necesita el amor de una pareja, sino que el amor está por todas partes, en cada gesto bonito que haces, en cada buen pensamiento, en cada sonrisa que dedicas. Son diferentes tipos de amor, o tal vez éste se encuentra en diferentes grados, pero aún así, son muestras de amor. Ahora lo sé; siempre has estado ahí, y aún lo estarás  por mucho tiempo, no importa lo que pase.  Sólo espero no volver a  olvidarlo                                                                                                                                                                              
                                                                                                                                                              Inma *